Federico Fellini y el guionista Tullio Pinelli, desde que se conocieron, allá por 1946, en los albores del neorrealismo italiano, mantuvieron una gran amistad y una notable labor creativa que forjó películas como ‘Los inútiles’, entre otras muchas. Pinelli, abogado de profesión, abandonó el mundo del derecho, se instaló en Roma y ejerció de guionista. Su talento para las estructuras, los libretos bien escritos y la facilidad en la construcción de diálogos chispeantes e irónicos, le granjearon una reputación utilizada de igual modo por otros cineastas. El culo inquieto de Fellini siempre estaba en ebullición, muñendo historias sin parar, que Pinelli ordenaba y le daba el sentido felliniano que el autor de ‘La dolce vita’ exigía.
De los guiones que quedaron en el limbo, en el cajón de los proyectos no producidos, se encontraba el tratamiento de una bonita historia sobre la migración de italianos hacia los Estados Unidos. Ese libreto, ahora rescatado por Gabriele Salvatores, responsable, entre otras piezas, de ‘Mediterráneo’ (1991), se ha titulado ‘Napoli New York’ (2024) y cuenta un relato optimista, humano, solidario, resilente, empático, sobre un niño, Carmine y una niña, Celestina, púberes, salidos de la dureza de los barrios miserables de Nápoles, que por los avatares del destino suben a un barco de pasajeros y viajan como ilegales, rumbo a Nueva York.
La acción arranca en 1949. Si la II Guerra Mundial, a su paso por el empobrecido sur de Italia, había dejado una zona devastada, paupérrima y deprimida, una explosión en uno de los barrios más degradados de la ciudad mediterránea, deja una situación desoladora de destrucción y muerte. Una niña sobrevive, pero se entera de que es huérfana, que lo ha perdido todo y para sobrevivir se junta por azar con un chaval despierto, atrevido, pillín, sinvergüenza, dominador del juego de las cartas y bribón espabilado, cuyos caminos se cruzan, suben a un barco y ya no se separarán.
Mientras que Carmine no tiene a nadie en Norteamérica, Celestina tiene una hermana mayor que un día decidió migrar por razones laborales y escapar de la miseria más terrible. Cuando pudo envío una tarjeta con su dirección y la noticia de estar comprometida con un hombre de Nueva York.
‘Napoli New York’ tiene un pequeño prólogo de situación que describe un ambiente sórdido y deplorable, de angustia y hambre, con un retrato de gente con trabajos de dura supervivencia, cuyo ambiente de dolor y tristeza parece empujar a los personajes a la huida, a la búsqueda de un porvenir mejor. La tierra de la oportunidad aparece por mediación del destino.
La travesía en el barco Victoria está partido en dos bloques. Uno, de penuria y aislamiento, en la que los dos niños son polizones y tratan de conseguir comida para alimentarse y, otro, cuando el oficial de seguridad de la nave, encarnado por Pierfranceso Favino, los recoge y tras un enconado debate con su moralidad y conciencia por tratarse de gente ilegal y sin pasaje (no tolera que se le hayan colado), los acoge y les busca una utilidad, empleándolos en la cocina.
El último bloque se desarrolla en Nueva York, en una urbe bulliciosa que asume la llegada masiva de migrantes y que ocupan barrios de la ciudad donde instalarse y progresar. Carmine y Celestina entran sin papeles, de manera fraudulenta, y la única obsesión de los dos es encontrar a la hermana de Celestina. Y pronto la encuentra, pero en la portada de los periódicos. Ha matado al hombre con el que vivía en defensa propia ante la violencia que el tipo mostraba contra ella. Todo parece indicar que será declarada culpable y será ajusticiada.
Un drama acerca de encontrar el sitio en el mundo, un acercamiento a los derechos humanos, el cariño y amor de Favino y su mujer, que no tienen hijos, hacia los dos niños desamparados y un giro final de talante pícaro, entonan una película, elaborada con gusto desde el diseño de producción y fotografía, que no sé cuánto guarda y respeta el guion original.
Tal y como ha quedado la película, que nunca termina de explosionar, y se mueve en la corrección más absoluta, en su tono agridulce, pero no me llega a emocionar y tampoco a robarme el corazón. Demasiado contenida y prefabricada. Un tipo de cine construido con el alarde de los sentimientos y la emoción, base sólida a la que Gabriele Salvatores le proporciona una dimensión complaciente, pensando en el público.
Reseña de José Manuel León Meliá
| Naples to New York (2024) | |
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Rating: N/A/10 (N/A votes) Director: Gabriele Salvatores Writer: Federico Fellini, Tullio Pinelli, Gabriele Salvatores Stars: Tomas Arana, Omar Benson Miller, Pierfrancesco Favino Runtime: N/A Rated: N/A Genre: Drama Released: 21 Nov 2024 |
| Plot: Follows two Neapolitan kids as they journey to New York to escape Italy's early postwar poverty. | |
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