Fidel (Carlos Iglesias) es un hombre normal y corriente de mediana edad que intenta subirse al último tren que pasará por su aburrida y monótona vida, aunque esto implique un fin de semana a todo lujo y completamente fuera de su alcance en la Suite Nupcial de un hotel en Toledo. Allí tratará de tener una aventura con Marisa (Ana Arias), aunque las cosas no pasarán exactamente como las tenía pensadas. Casualidades de la vida, su mujer también tenía planes para ese mismo fin de semana… Se masca la tragedia.
La suite penosa
Quinta película que dirige Carlos Iglesias, con un presupuesto más que modesto con el cual se ve claramente un resultado final algo desastroso. Nada que ver con sus dos películas exitosas que fueron «Un franco, 14 pesetas» y «Dos francos, 40 pesetas».
Adapta al cine una obra de teatro con un guion clásico de enredos matrimoniales que pretende hacer algo de gracia, pero a medida que la vas viendo no te da más que pena y algo de vergüenza ajena. Las situaciones son penosas, y aunque los actores intentan hacer unas interpretaciones correctas, quedan deslucidas ante una dirección y montaje totalmente calamitoso.
Nos cuenta la historia de Fidel un hombre casado que pretende tener una aventura con una chica joven de su oficina, la cual le ha tirado un poco los trastos, para ello queda en Toledo e intenta impresionarla cogiendo dos noches en la mejor habitación del hotel, con un precio más que elevado. A su mujer le dice que está en Paris en viaje de negocios, todo se torcerá cuando su esposa también acude al mismo hotel para una presentación de artículos sexuales.
El cómico Jose Mota interpreta a un mujeriego amigo del protagonista que se aloja también en el mismo hotel con una brasileña, algo que también complicara el asunto a Fidel. Hay también algunos secundarios en pequeños papeles como Santiago Segura o Roberto Alvarez como recepcionista, pero poco o nada pueden hacer con un guion tan flojo.
Carlos Iglesias es Fidel, Ana Arias es la «amante», Ana Fernández es su mujer y Eloisa Vargas una simpática gobernanta del hotel. En resumidas cuentas una película francamente mala, totalmente impostada con unos diálogos poco brillantes y un aburrimiento absoluto.
Estreno en España 10 de enero de 2020.
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