Un slasher sueco con poca imaginación El género slasher dio un vuelco al cine de terror en los años 80, matarifes con máscaras que mataban a diestro y siniestro de las formas más variopintas, la fórmula era la misma en casi todas las películas, grandes cuchillos, asesinatos espantosos y un personaje prácticamente indestructible que daba paso a alguna franquicia. Todas ellas destinadas a un público juvenil adolescente que la verdad consiguió llenar muchos cines. La administradora de ...