Valerian y la ciudad de los mil Planetas (Valerian and the City of a Thousand Planets , 2017)

Director: Luc Beson

Guión: Pierre Christin, Luc Beson basandose en los cómics “Valerian y Laureline” de Jean Claude Mezieres

Intérpretes: Dane Dehaan, Cara DelevingneClive Owen

Duración: 2 horas 17 min.

Fotografía: Thierry Arbogast

Musica: Alexandre Desplat

Género: Ciencia Ficcion

Valerian y Loreline son dos agentes humanos en una estación espacial que alberga multitud de razas y especies. Cuando son encargados de recuperar un extraño animal, único en el universo se encontraran en medio de una conspiración en la que se juega el destino de una raza.

Los malos augurios, el hipe, al anti hipe, los juicios que se replican en la red con bastante poca fiabilidad etc han atizado a esta película sin compasión. ¿Que es lo que te encuentras cuando entras a verla?: Una gozada audiovisual.

Naves espaciales, planetas, civilizaciones extrañas, persecuciones…. Son muy destacables los conceptos futuristas que encontramos en la película y que consiguen lo que no conseguía una película de ciencia ficción desde hace tiempo: sorprender.

Te emociona encontrar una Space Opera hecha con amor al género y profesionalidad. Los efectos especiales son de primer nivel, la historia discurre sin problemas durante sus dos horas y cuarto y no entiendo que problema de peso se le puede encontrar. Mi niño interior que todo aficionado tiene se entusiasmaba ante una película que de verdad da lo que promete.

Dane Dehaan y Cara Delevigne no serán tal vez los actores mas carismáticos pero cumplen con sus papeles.

Beson ha construido un blockbuster que puede mirar a la cara a cualquier película comercial norteamericana que se ha estrenado este verano. Un aire fresco que sin embargo no está funcionando en taquilla. Tal vez le pase como a Tintín, un personaje de cómic consagrado en Europa pero que es desconocido en EEUU.

Sería una pena que la taquilla mundial no apoyase esta obra y nos quedemos con las probables continuaciones que Beson debe de tener en mente.

No concibo a ningún aficionado a la ciencia ficción que no se emocione al compás del Space Oditty de Bowie y como es utilizado en el arranque de la película.

Calificación: