Las secuencias iniciales ya expresan el deseo de reconciliarse con la trilogía clásica. Sigue los esquemas narrativos de sus loables referentes, si bien los momentos más memorables del extenso filme (154 minutos) los encontramos en la primera hora. Ello no resta méritos al que es un entretenimiento de altura que transcurre por exóticos escenarios, vinculando la trama a unos importantes acontecimientos históricos ocurridos en diferentes periodos. Partiendo de esos hechos documentados incorpora detalles ficticios que revisten la intriga de misterios y fascinantes revelaciones. Lógicamente, introduce agradecidos guiños nostálgicos; no obstante, evita el abuso de este manido recurso.
Indiana Jones termina de jubilarse y aunque los últimos alumnos mostraban poco interés por sus clases, se siente a disgusto. El futuro que tiene por delante no resulta muy halagüeño: Marion le ha pedido el divorcio y está solo. Inesperadamente, recibe la visita de Helena Shaw, la hija de un reputado arqueólogo inglés con el que compartió una arriesgada aventura durante la Segunda Guerra Mundial. Ambos recuperaron la mitad de la Anticitera que construyó Arquímedes. Hay quienes piensan que el sofisticado mecanismo permitía aprovechar ciertas fisuras temporales y viajar en el tiempo. Ahora, un antiguo nazi, el astrofísico Jürgen Voller, que trabaja para la NASA con nacionalidad estadounidense, trata de localizar a toda costa las dos partes del artilugio.
Prácticamente, el preámbulo constituye una trepidante película en sí mismo e indudablemente atrapa la atención del espectador. La pericia con que se han aplicado las tecnologías digitales permite rejuvenecer de manera totalmente creíble a los actores.
Superada la prometedora introducción, salta hacia adelante 25 años y se sitúa en el populoso desfile de bienvenida a los astronautas del Apolo 11. Ese marco, fantásticamente recreado, se presta a desarrollar con facilidad unos argumentos que dan mucho juego. El propio villano representa una versión pérfida del ingeniero espacial Wernher von Braun, artífice de los misiles V2, a quien Madds Mikkelsen (Casino Royale) le confiere el carisma necesario.
Avanza siguiendo el esquema convencional, con acción, suspense y humor, hasta el sorprendente desenlace, donde se vuelve a evidenciar el virtuosismo técnico de esta gran producción, rematada por un inspirado epílogo.
El único aspecto que encaja con dificultad reside en la agilidad del octogenario protagonista. Harrison Ford se mantiene en plena forma, pero los esfuerzos físicos que va acumulando sin apenas descanso generan ese pequeño reparo. Junto a él, la enérgica Phoebe Waller-Bridge supone una auténtica revelación. El papel de Antonio Banderas, al igual que sucede con otros secundarios, se queda en superficial.
El reconocido director James Mangold (Copland, Inocencia interrumpida, Kate & Leopold, Identidad, En la cuerda floja, Le Mans ’66) responde sobradamente al reto de relevar a Steven Spielberg e incluso mejora las sensaciones que dejó Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal (2008).
John Williams aporta su talento musical y firma una partitura redonda con varios temas nuevos. Además, se escucha brevemente un éxito de los Beatles que contribuye a ubicar el relato en 1969.
Reseña de Eduardo Casanova
| Indiana Jones and the Dial of Destiny (2023) | |
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Rating: N/A/10 (N/A votes) Director: James Mangold Writer: Jez Butterworth, John-Henry Butterworth, David Koepp Stars: Harrison Ford, Karen Allen, Phoebe Waller-Bridge Runtime: 154 min Rated: PG-13 Genre: Action, Adventure Released: 30 Jun 2023 |
| Plot: Archaeologist Indiana Jones races against time to retrieve a legendary artifact that can change the course of history. | |
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