El mundo de la ciencia e investigación matemática, sus enredados jeroglíficos, laberínticas ecuaciones y boscosos desarrollos, son asuntos complicados y difíciles, propios para mentes privilegiadas y conocedoras de la materia que, sin embargo, su tratamiento en el cine como metáfora para hablar de otros temas queda bien, incluso de manera entretenida, si su espesa maraña de números y símbolos está entramada de forma elaborada y útil en una historia de las de toda la vida.
No hace mucho comentaba una película de producción francesa, ‘La voie royale’ (2023), de Frédèric Mermoud, cuya protagonista, una joven muy dotada para enfrentarse a los misterios de los números en su afán de alcanzar cimas muy altas como científica. Un planteamiento similar, con un parecido razonable, aunque en un tono más oscuro, encuentro en otra pieza, también francesa, que merodea flecos semejantes.
Se titula ‘El teorema de Maguerite’ (2023) y está escrita y dirigida por la cineasta Anne Novion. Narra la absorbente patalogía obsesiva de una joven, Marguerite Hoffmann (Ella Rumpf), por descifrar y llegar a una conclusión de un mítico intríngulis numérico denominado La Conjetura de Goldbach. Una maraña que es como un enjambre a la que se han dedicado muchos investigadores que han forzado su mejor capacidad intelectual para resolver sus enigmas. En este reto está metida el personaje femenino, estudiante muy cualificada en la École Normale Supérieure.
Marguerite es una líder. Posee una cabeza muy bien amueblada para las matemáticas. Sus conocimientos y reflejos para resolver cualquier formulación es la envidia de sus compañeros. Su director de tesis es uno de los profesores del instituto, Laurent Werner (Jean-Pierre Darroussin), quien durante muchos años dedicó gran parte de su tiempo libre en enfrentarse al desafío de La Conjetura de Goldbach, no logró llegar hasta el final y ahora reposa toda su confianza en su aventajada
alumna.
La Conjetura de Goldbach expone que «todo número par mayor que 2 puede escribirse como suma de dos números primos». Pero esta enrevesada cuestión no es más que una máscara para afrontar temas personales terrenales. Y estos conciernen al eje central del relato, Marguerite, que presenta una serie de anomalías o taras como humana que trata de disimular aislándose del mundo y dedicarse en cuerpo y alma al esfuerzo como investigadora.
Marguerite es una joven entregada, con pasión y denuedo a su trabajo. Apenas se relaciona con otra gente, salvo su profesor, y apenas tiene contacto social. Vive como una ermitaña fundida con las enormes pizarras o libretas en las que traza con gran dominio infinidad de arabescos. Viste con mucha discreción, casi con un estilo vulgar, y calza zapatillas de andar por casa por sentirse más cómoda.
Esta chica es una nerd que presenta una inestabilidad emocional muy significativa. La directora, en la primera parte del filme, nos la presenta como una chica solitaria, sumida en el estudio y tiene un carácter abstraído y poco sociable. Gran parte del funcionamiento de la historia radica en su intérprete. Ella Rumpf compone una figura ensimismada y temerosa por una gran desconfianza.
La ruptura del tono de la película se alcanza en el momento álgido de la exposición científica de su teoría sobre La Conjetura de Goldbach. En plena exposición de su tratamiento un joven muy espabilado, Lucas Savilli (Julien Frison), proveniente de la Universidad de Oxford encuentra un fallo en el postulado. Desconcertada y hundida, abandona por las bravas su implicación por desentrañar la fórmula y decide buscar salida a su frustración en el campo laboral de los mileuristas.
Anne Novion mete un giro en el guion y lleva el argumento a una zona salpicada de recursos más propios del cliché. Marguerite se aleja del mundanal ruido y se introduce en los pisos de alquiler y a currar en trabajos que no requieren especialización. Incluso gracias a su manejo de las probabilidades se mete en las redes del juego de mesa llamado Mahjong, de origen chino, en el que se muestra muy lista y obtiene el dinero suficiente para subsistir. Aplicando el concepto de progresión aritmética, consigue, ante la sorpresa, asombro y estupefacción de sus rivales hacerse con un botín para mantenerse en el ajetreo de la vida.
Bien es verdad que esta zona de la historia que subraya el estado anímico de confusión y desorientación motivado por una fuerte contradicción empuja a Marguerite a penetrar en el lado oscuro. El guion se vuelve novelesco y aunque persiste en el desarreglo psicológico, hace ver, por otra parte, una de las grandes necesidades del personaje. El afecto, el conocer a chicos e intentar follar. Ansiedad aliviada con un joven melenudo que se llama Yanis, que es abordado por Marguerite en la calle, que no desaprovecha la ocasión para acostarse con ella e, incluso, la chica llega en un momento del coito a tomar la iniciativa, colocándose encima y, cómo no, evaluando las posibilidades de éxito del rollo nocturno.
Anécdotas que quieren reflejar que a pesar de este distraimiento tipo carpe diem, aprovecha el momento, no la aleja del todo de su máxima y única ambición. La presencia de Lucas, competidor en la investigación, se torna amigable y complementaria. Con él tiene momentos felices e instantes de querer que esté lejos de ella. En la situación de ahora sí, ahora no, Marguerite, en su desatada neurosis, encuentra la clave de su investigación y desarrolla una tesis de inteligencia suprema calificada como obra maestra por doctos matemáticos en valorar un descubrimiento de semejante magnitud.
‘El teorema de Marguerite’ es un proceso catártico, visceral, apasionante para los amantes de los números y sus infinitas posibilidades (no es mi caso) cuyo fascinantes cálculos e incomprensibles fórmulas no son más que una retorcida maraña de cifras y símbolos cuya única solución es el amor. En definitiva la película de Anna Novion lo que nos quiere decir es que su criatura, Marguerite, es una joven de 25 años muy inteligente ofuscada en su dédalo de soluciones numéricas pero incapaz de encontrar la fórmula para decir «te amo».
Irregular pero absorbente, maniática, obsesiva y psicológicamente penetrante. Tiene sus clarooscuros pero la película funciona y tiene una primera hora de alto voltaje.
Reseña de Jose Manuel León Meliá

 

Marguerite's Theorem (2023)
Marguerite's Theorem poster Rating: 7.0/10 (519 votes)
Director: Anna Novion
Writer: Anna Novion, Mathieu Robin, Marie-Stéphane Imbert
Stars: Ella Rumpf, Jean-Pierre Darroussin, Clotilde Courau
Runtime: 112 min
Rated: N/A
Genre: Drama
Released: 01 Nov 2023
Plot: A brilliant mathematics student at France's top university the Ecole Normale Supérieure. On the day of her thesis presentation, a mistake shakes up all the certainty in her planned-out life, she decides to quit everything and star...
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