Robin of Loxley (Taron Egerton), un cruzado curtido en mil batallas, y su comandante morisco (Jamie Foxx) se rebelan contra la corona de Inglaterra que está llena de corrupción. La enésima e innecesaria versión cinematográfica del popular arquero de Sherwood se resuelve en un producto comercial, de escasa enjundia y que pretende adaptarse a los gustos actuales. Ese es precisamente su punto débil, puesto que con tal intención no repara en anacronismos, especialmente en cuanto al ...