Entre los detalles incoherentes y las decisiones injustificables transcurre este thriller mediocre. Desaprovecha el único elemento original de su premisa y no aporta nada al género. Además, el ritmo sufre altibajos que desbravan la tensión deseable y la resolución no sorprende en absoluto. El experimentado Brad Anderson (El maquinista, Transsiberian, La última llamada) ha rodado con desgana un guion pobre, que solo aguanta bien los primeros minutos. Ni siquiera impactan las rutinarias secuencias de acción.
Hace once meses que Frank ...