Sigue la línea de la anterior sin superarla. Estamos básicamente ante un divertimento familiar exento de mensajes profundos y trasfondos dramáticos. La propuesta cautiva durante la mayor parte del metraje, especialmente en los trepidantes compases iniciales. La enérgica introducción, aunque no guarde una relación directa con la trama principal, constituye su espectacular carta de presentación y depara las mejores secuencias del filme. Los protagonistas que conocemos siguen siendo la baza fundamental. No acierta tanto con ...