El imperio contraataca
Sin lugar a dudas, la película más extravagante y marciana proyectada en el Festival de Gijón fue esta cinta francesa del peculiar director Bruno Dumont, un irregular cineasta de lo absurdo carente de la comicidad que puede tener Quentin Dupieux por poner alguna similitud.
Nos encontramos en un pequeño pueblo de pescadores en la costa de Opalo, al norte de Francia, el nacimiento de un bebe con características especiales hará que se desate una ...