El perfume embriagador
No sé si soy yo, pero la estética del film, vestuario, maquillaje, decorados o incluso de música de Danny Elfman me han parecido demasiado copiados a la magnífica versión de Coppola de 1992. Poca imaginación he visto desarrollando esta historia que claramente se inclina hacia lo romántico que hacia el horror, un melodrama gótico que no da miedo e incluso me ha rallado bastante con el protagonismo de esas gárgolas de piedra que ...