En favor de esta secuela se ha de apuntar básicamente el esfuerzo de los artífices por ofrecer una película distinta, dándole un giro de 180 grados a su presupuesto argumental, cuyo desarrollo transcurre por varias localizaciones, a diferencia de lo que ocurría en la exitosa No respires (2016). Por contra, estira la ficción con detalles inverosímiles que lleva a cotas totalmente increíbles. Además, la trama se va deshinchando paulatinamente, agotando sus recursos y tornándose repetitiva, incluso el clímax contiene aspectos grotescos.

Después de librarse de los intrusos que intentaron robarles, el aguerrido exmilitar invidente se ha mudado a una casa apartada del centro de la ciudad. Allí trata de educar a su hija Phoenix e instruirla en pruebas de defensa personal y supervivencia. No le deja ir al colegio por miedo a que pueda ocurrirle algo malo. Sin embargo, sus cautelas se pondrán a prueba cuando un grupo de criminales, irrumpa en la vivienda con el propósito de secuestrar a la niña.

La certera concisión en los preámbulos permite abocarnos a la intriga con celeridad de forma altamente prometedora si nos atenemos a los distintos elementos que presenta. Lo primero que llamará la atención a quienes recuerdan el film anterior, es la asumible manera de convertir a quien conocíamos como un tipo cruel y despiadado en una persona de buenos sentimientos y padre protector. No obstante, apenas se preocupa por vincular la historia con sus antecedentes y así evita desconcertar al espectador que no la haya visto.

Más opaco se muestra al introducir súbitamente a los despreciables delincuentes que atacan la morada de este hombre ciego. Dejan para el final, a modo de golpe de efecto imprevisible, la justificación de su asalto, aunque resulta poco convincente.

Hasta alcanzar esa resolución, se ajusta a lo esperado: la violencia se alterna con momentos de máxima tensión, donde no siempre ocurre aquello que se intuye, pero la puesta en escena se ve perjudicada por la infinidad de peligrosas adversidades que el anciano protagonista supera. Se repone inmediatamente de cualquier herida o contusión, recuperando la plenitud de facultades, lo cual le aproxima bastante al perfil de un veterano superhéroe.

Stephen Lang (Avatar), a sus 69 años responde a las elevadas exigencias físicas del papel. Igualmente destaca el trabajo de la jovencísima Madelyn Grace; mientras el resto del elenco asume roles superficiales o simplemente de relleno.

Critica de Eduardo Casanova

Don't Breathe 2 (2021)
Don't Breathe 2 poster Rating: 6.1/10 (22,905 votes)
Director: Rodo Sayagues
Writer: Fede Alvarez, Rodo Sayagues
Stars: Stephen Lang, Madelyn Grace, Brendan Sexton III
Runtime: 98 min
Rated: R
Genre: Horror, Thriller
Released: 13 Aug 2021
Plot: The sequel is set in the years following the initial deadly home invasion, where Norman Nordstrom (Stephen Lang) lives in quiet solace until his past sins catch up to him.
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