Todo va bien en la vida de Bea, una joven y talentosa arquitecta, hasta que en la misma semana pilla a su novio enrollándose con una de las presentadoras más guapas de la tele y es despedida con una indemnización ridícula. Con el desastre en los talones, Bea no tiene más remedio que volver a su pueblo natal, donde, además de un paisaje idílico, le espera un futuro incierto, una familia como poco peculiar y un vecino «misterioso»

La exageración en las formas y la precipitación narrativa se imponen en esta comedia que cae en la astracanada más de una vez, haciendo de ella una película tan ligera como increíble desde los primeros instantes. Aquellos que sean de risa fácil seguramente verán cumplidas sus expectativas, pero da la sensación de haberse desaprovechado un reparto de altura con un guión flojo.

Bea tiene por delante un futuro prometedor: es la arquitecta que ha diseñado el proyecto estrella de su empresa, en el que también colabora su novio. Justo cuando se siente completamente feliz, se entera de que el chico al que ama ha tenido un affaire con la presentadora televisiva de moda. Tras la ruptura decide volver al pueblo del que se marchó años atrás y buscar el consuelo de su peculiar familia. Allí el destino le brindará nuevas oportunidades.

Todo se antoja artificial y forzado. Las situaciones cómicas están metidas con calzador y se acelera en diferentes terrenos. Si en el humor se muestra irregular, la parcela romántica está tratada de manera brusca y los vaivenes emocionales de la protagonista hacen el relato muy inverosímil.

El plantel de personajes secundarios rinde de forma desigual: algunos, como los hermanos de la joven, resultan demasiado histriónicos y otros pasan sin pena ni gloria; solo unos pocos cumplen discretamente con comedidas aportaciones, ocasionalmente simpáticas o entrañables, destacando especialmente la madre de esta chica desubicada.

El film parece imbuido de los clichés propios de las sitcoms televisivas, únicamente faltan las risas grabadas y surgen momentos de vergüenza ajena, incluso queda por debajo de la olvidada ‘No culpes al karma lo que te pasa por gilipollas’ (2016); referencia a tener en cuenta ya que ambas adaptan sendas novelas de Laura Norton.

El carisma y oficio de sus intérpretes evitan la zozobra completa. Hay que reconocer la implicación de Clara Lago, Alexandra Jiménez y Álex García, que intentan mantener sus superficiales papeles a flote, aunque quien lo consigue con mayor solvencia y convicción indudablemente es Carmen Maura.

Estamos ante un título olvidable; uno de tantos estrenos “que viene y bah”.

Crítica de Eduardo Casanova

 

 

Gente que viene y bah (2018)
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Director: Patricia Font
Writer: Darío Madrona, Carlos Montero, Laura Norton (novel)
Stars: Clara Lago, Alexandra Jiménez, Carmen Maura, Carlos Cuevas
Runtime: N/A
Rated: N/A
Genre: Comedy
Released: 29 Jun 2018
Plot: N/A
Calificación: